Son las dos menos veinte de la madrugada, llevo un rato dandole vueltas a algo sin saber muy bien a qué es. No tengo sueño, y Ade está viendo arropada hasta las cejas El amor está en el aire, aunque ni siquiera sabe muy bien de qué va y se ha echado una pequeña siesta sin que hubiera anuncios.
La verdad es que no se donde está el amor, pero se donde están mis dudas sobre todo lo que dudo -que no es poco-: en algunas heridas del pasado, en el futuro incierto aunque se crea seguro, en algunos te echo de menos, en días venideros.
En todo aquello que no puedo controlar, y ya es mucho.
Me doy cuenta de que antes, el antes de antes, no era feliz, pero lo controlaba todo: mis horarios, mis decisiones, mis días, mis pérdidas de sinrazón.
Ahora soy inmensamente feliz -que lo es todo- y sin embargo, es cuando más miedo tengo.
01:43
BSO Outlandish.
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1 comentario:
Suele ocurrir, porque es arriesgado. Un besillo Isa.
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